Al comenzar a comer crudo hay que quitarse prejuicios sobre los alimentos y empezar a probar. ¿Brócoli sin hacer al vapor o salteado?.Pues es posible y ¡nos encanta!.
Por cierto, las crucíferas ( brócoli, col, repollo, lombarda, coliflor, etc ) son un potente anticancerígeno, pero esta propiedad se pierde casi al completo al cocinarlos.
Ingredientes:
-1/2 Brócoli.
-5 cucharadas de tamari.
-Zumo de 1/2 limón.
-3 cucharadas de aceite de oliva.
Para la salsa Thai:
-1/4 de Taza de pure de almendras o de sésamo (tahini).
-1 cucharadita de zumo de limón.
-1 cucharadita de sirope de ágave.
-1 cucharadita de vinagre de manzana.
-2 cucharaditas de tamari.
-1/2 diente de ajo.
-Un trocito de jengibre.
Elaboración:
Cortamos flores pequeñas del brócoli, si es necesario las partimos con un cuchillo por la mitad. Lo lavamos bien bajo el grifo y le quitamos el exceso de agua.
Mezclamos los ingredientes para marinarlo: tamari, zumo de limón y aceite. Ponemos en un recipiente el brócoli a marinar en la mezcla anterior. Para que penetre bien el aliño, lo podemos “masajear” y remover de vez en cuando.Lo dejamos reposar una hora aproximadamente.
Cuando ha pasado este tiempo, ponemos el brócoli en una bandeja del deshidrador con una lámina de teflexx, a una temperatura de 41º C durante 1 hora y media.
Para hacer la salsa, batimos todos los ingredientes que la componen.
En la foto usamos un paté de remolacha que teníamos en la nevera y salsa de yogur de frutos secos, es decir, puedes usar otra salsa, pero la Thai le va muy bien.
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