Un must para los días fríos
Si tuviera que elegir la receta que más veces he cocinado y que siempre triunfa creo que sin duda debería ser esta, el guiso de patatas con soja.
Es un plato sencillo, no requiere demasiado tiempo para prepararlo y es imposible que salga mal. Además en casa nos encanta y desde que Jara era bien pequeña, fue su plato favorito.
Es un guiso reconfortante en los días fríos, delicioso y con un caldo final trabado y con mucho sabor. Tiene todo lo necesario para elevarte cuando lo estés comiendo.
El corte de las patatas, la clave
Seguro que ya has escuchado, a mí o a otros cocineros, chascar las patatas. Este es el corte que solemos usar en guisos de este tipo.
Consiste en clavar el cuchillo de forma perpendicular a la superficie de la patata y girar la muñeca haciendo que la hoja del cuchillo desgarre y arranque un trozo de patata. Como el corte final no es limpio sino que se producen aristas y desgarros en la patata, estas zonas se cocinarán antes que el interior y se desharán en el caldo.
De esta manera tenemos en la misma patata el responsable de que nuestro guiso de patatas con soja quede un poco más espeso, sin la necesidad de utilizar harinas ni almidones para dar cuerpo al caldo como podría suceder en otros platos.
No es un corte para nada difícil, sólo requiere un poco de práctica si no lo has hecho nunca. Ya verás que como lo hagas con el kilo de patatas que necesita la receta, al final lo tienes dominado.
Un plato completo
En esta receta como fuente de proteína usaremos soja texturizada. Es una proteína deshidratada que puedes conseguir en supermercados o tiendas especializadas como herbolarios.
El tamaño del texturizado para nuestras patatas con soja dependerá del que más te guste, lo puedes encontrar en muchos formatos, fino, medio, grueso, filetes…
A nosotros nos gusta especialmente el texturizado grueso para esta receta pero es verdad que dependiendo de la marca el tamaño puede variar dentro del formato grueso.
También puedes usar texturizados de otras legumbres como guisante. Y en el caso de que no quieras utilizar soja ni encuentres otro tipo de texturizado, aquí puedes ver nuestra receta de estofado de patatas y guisantes.
Son ricos en proteína completa y absorben el sabor del caldo y del guiso, por lo que hay que asegurarse de que antes de añadirlo a la cacerola el caldo tenga sabor.
Si cocinas estas patatas con soja con agua en lugar de caldo, deja que hierva con las verduras, añade sal y espera a que tenga sabor, hasta entonces no agregues la soja texturizada porque sino quedará muy sosa.
Receta de nuestro guiso de patatas con soja
Guiso infalible y vegano de patatas con soja
Course: Principal, segundo platoCuisine: EspañolaDifficulty: baja4
raciones10
minutes30
minutesIngredientes
1 kg de patatas.
1 cebolla.
1/2 pimiento rojo.
1/2 pimiento verde.
1 o 2 zanahorias.
2 dientes de ajo.
1 tomate maduro.
2 tazas de soja texturizada gruesa.
1200 ml de caldo de verduras.
1 cucharadita de cúrcuma en polvo.
1/2 cucharadita de pimentón dulce.
3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra.
2 hojas de laurel.
100 gr de guisantes.
elaboración
- Limpiar y picar muy fina la cebolla y rehogar con el aceite y un poco de sal.
- Mientras la cebolla se va cocinando, limpiar la zanahoria y los pimientos y cortar en trozos pequeños. La zanahoria las puedes cortar en rodajas finas. Agregar a la cacerola junto con la cebolla.
- Cuando las verduras estén tiernas, agregar los ajos picados y rehogar uno o dos minutos más.
- Añadir las especias en polvo, el pimentón y la cúrcuma, junto con el laurel. Cocinar un minuto y tener el tomate rallado listo para cortar la cocción y evitar que se quemen las especias.
- Incorporar las patatas peladas y chascadas, la soja texturizada gruesa y el caldo y dejar que hierva durante 15 minutos.
- Al cabo de ese tiempo las patatas deberían estar casi tiernas pero aún un poco duras en el interior. Agregar los guisantes y dejar que se cocine todo junto durante otros 5 o 7 minutos. De esta manera los guisantes se cocinarán pero sin perder su color verde intenso y las patatas acabarán de quedar tiernas.
- Ajustar de sal si fuera necesario y servir con perejil fresco picado por encima.