Tras un fin de semana frío y lluvioso, hoy te traemos una receta perfecta para entrar en calor. Ideal para una merienda en esos días que no apetece separarse de la estufa.
Ya llevábamos algún tiempo con ganas de preparar cabello de ángel y en los últimos días nos han regalado varias cidras, que es la calabaza con la que se elabora el cabello de ángel.
Como el tradicional lo solemos encontrar demasiado dulce y suele tener muchísimo azúcar, hemos hecho una receta a nuestro gusto. Con menos azúcar, más suave y con ingredientes más sanos. Ha quedado morenito porque lleva panela, pero está buenísimo.
Como complemento a estas deliciosas mallas de hojaldre y cabello de ángel, te mostramos cómo hacer un chocolate a la taza de manera fácil y sana.
Esperamos que te guste tanto como a nosotros. Si lo quieres compartir te lo agradecemos.
Ingredientes:
Para 2 unidades.
Para la malla:
– 1 lámina de hojaldre vegano.
– 1 Cucharada de sirope de ágave.
– 1 cucharadita de leche vegetal.
Cabello de ángel:
– 1 cidra (o calabaza de cabello).
– Panela.
– Sirope de ágave.
– 1 rama de canela.
– Piel de 1 limón.
Para el chocolate:
– 2 Tazas de leche vegetal.
– 2 Cucharadas de cacao puro en polvo.
– 2 Cucharadas de panela u otro edulcorante (la cantidad dependerá del gusto).
– 1 Cucharada colmada de Maicena (se puede sustituir por kuzú).
– 1 cucharadita de canela en polvo.
– Esencia de vainilla (opcional).
Elaboración:
Para el cabello de ángel:
Cortamos la cidra por la mitad, sacamos las pepitas y la pelamos, con cuidado porque la piel es bastante dura.
Una vez limpia, la cortamos en trozos grandes y la ponemos a cocer al vapor hasta que esté bien tierna (yo tardé una casi una hora). La dejamos enfriar y la escurrimos completamente, estrujándola con las manos.
Ahora iremos sacando los hilos con los dedos o con la ayuda de un tenedor para ir rascando la carne, cuanto más fino quede mejor, pero a mí me gusta encontrarte de vez en cuando un trocito pequeño.
Ahora pesamos la pulpa y la ponemos a cocer con una tercera parte de su peso de panela, añadimos también la rama de canela y la piel de limón. Hay recetas en las que usan mucho más azúcar, pero a nosotros no nos gusta demasiado dulce ni tan empalagoso. Cuando comience a hervir, vamos removiendo para que caramelice la panela, y tras 10 minutos a fuego bajo, añadiremos el ágave que hará que quede más meloso. Dejamos cocer 5 minutos más, retiramos del fuego y dejamos enfriar.
Para las mallas:
Cortamos una lámina de hojaldre en dos rectángulos de unos 20×15 cm más o menos. A lo ancho, dividimos la parte más larga en tres partes, la del centro a pincharemos con un tenedor, ya que no nos interesa que suba y a las otras dos partes, que quedan a los lados, les haremos unos cortes con el cuchillo desde fuera hacia el centro con una separación de 1 cm entre ellas (tal como se ve en la fotografía).
La parte central, la rellenaremos con el cabello de ángel y entonces iremos doblando las tiras laterales de forma alterna sobre el cabello, así formaremos la malla.
Con la primera y la última hay que hacer un poco de presión para que se peguen a la parte de abajo.
Preparamos una mezcla con una cucharada de ágave y una cucharadita de leche vegetal y pincelaremos la superficie.
Lo llevamos al horno, previamente calentado a 200ºC, durante 25 minutos.
Al sacar las mallas, las volvemos a pincelas con la mezcla de ágave y leche para que queden brillantes.
Para el chocolate a la taza:
Ponemos a calentar la bebida vegetal en un cazo, salvo media taza que será donde disolvamos todos los demás ingredientes.
Cuando la leche del cazo empiece a hervir, añadiremos el resto ya diluido y sin parar de remover (yo uso una varilla) esperamos a que vuelva a hervir, así se espesará. Retiramos del fuego y listo para servir bien calentito.
¿Alguna vez has preparado cabello de ángel en casa?.
Nos encanta escucharte. ¡Los comentarios son bienvenidos!.